Fingí dormir y dejé que mi hermano me comiera

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Fingí dormir y dejé que mi hermano me comiera

Fingí dormir y dejé que mi hermano me comiera. Alguna vez se lo queria regalar a mi hermano mayores, todo empezó cuando éramos pequeños y jugábamos al escondite, me fui a esconder al armario de mis padres y había un resquicio que podía ver todo lo que pasaba afuera. Y ese día mis padres entraron a la habitación, mi padre tiró a mi madre sobre la cama y le dijo que se quedara en cuatro patas, como era inocente pensé que estaban bromeando, pero cuando vi a mi padre tu pene en mi madre y ella se quejaba de que le dolía y aun así lo seguían haciendo sin parar y me di cuenta que a pesar del dolor mi madre lo disfrutaba, a mi también me empezó a gustar y me imagino en el lugar de mi madre con mi hermano detrás empujándome como un animal, pero solo estaba en mi imaginación.

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Cuando éramos adolescentes noté que mi hermano me miraba de otra manera y en la noche entraba a mi habitación y se masturbaba mientras me miraba dormir, y como soy una niña traviesa siempre dormía sin ropa interior con la esperanza de siendo jodido por él. Pero finalmente un día sucedió que ambos llegamos borrachos de una fiesta y aproveché para seducirlo frotándome sobre él y cuando me di cuenta de que tenía la polla dura, pero no tuve el coraje de hacer nada, me Tuvo la idea de fingir que me desmayé de tanto beber y en lugar de que el cabrón se preocupara por su hermanita, inmediatamente me quitó las bragas y metió su polla en mi coño, que todavía estaba muy apretado, y lo confieso. que al principio tuve que controlarme para no gemir de dolor mientras me penetraba mi hermano, que me folló toda la noche hasta correrse dentro de mí. Y así fue el día que fingí dormir y dejé que mi hermano me comiera